CARBAP responsabilizó a Nación, Provincia y municipios por la falta de avances en la Cuenca del Salado

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) emitió un duro pronunciamiento en el que repartió responsabilidades entre los gobiernos nacional, provincial y municipales por la falta de avances en las obras de la Cuenca del Salado, en medio de una de las inundaciones más extensas de los últimos años.

“Todos, sin excepción, cargan con una cuota de responsabilidad que ya no pueden esquivar”, afirmó la entidad ruralista, que además ratificó su “compromiso innegociable para terminar el Plan del Salado y proteger al interior productivo” de los recurrentes anegamientos.

En el comunicado, CARBAP subrayó que desde hace nueve meses los productores y habitantes de una vasta región del centro bonaerense enfrentan una inundación que “no se veía desde hace muchos años”. Aseguró que la persistencia del cuadro hídrico “expuso con crudeza reclamos que venimos planteando desde hace tiempo ante autoridades municipales, provinciales y nacionales”.

La entidad detalló que, en la Cuenca del Río Salado —unas 17 millones de hectáreas—, entre el 11 y el 13 de noviembre las imágenes satelitales registraron cerca de 2 millones de hectáreas inundadas o anegadas y aproximadamente 3,8 millones de hectáreas afectadas por las condiciones extremas.

Al describir esta última categoría, CARBAP explicó que se trata de superficies que, aun sin agua visible, carecen de condiciones mínimas para avanzar con las labores de siembra: falta de piso, caminos intransitables y ausencia de accesibilidad para maquinaria agrícola. “En los hechos, son hectáreas que quedaron fuera de producción”, advirtieron.

Con este diagnóstico, la organización volvió a reclamar decisiones y obras concretas para mitigar el impacto de las inundaciones y evitar que el atraso en la ejecución del Plan del Salado siga comprometiendo la producción y la vida de miles de familias rurales.