Diego Zudaire, de cabaña La Z, se mostró muy conforme tras la segunda edición de “Genética Rauchense”, destacando la calidad pareja de los animales y el excelente ambiente entre los productores.
El referente de Cabaña La Z destacó el éxito de la jornada y la satisfacción general entre compradores, vendedores y organizadores. “Fue un día de fiesta. Cuando todos están contentos es porque las cosas salieron bien. Fue un trabajo excelente desde que empezamos a bajar los animales”, expresó.
Zudaire valoró la organización conjunta con la Sociedad Rural y las casas consignatarias, subrayando que “hubo tiempo para todo, se vendió bien y salió bárbaro”. Sobre los precios, comentó que si bien no había podido seguir todo en el momento por la gran cantidad de gente, luego analizó los valores y concluyó que fueron “muy buenos”, especialmente en el caso de los vientres.

Destacó también la llegada de compradores de otras zonas de la provincia: “Está bueno que vengan, que vean los toros y vientres que se hacen en Rauch. La muestra dejó la vara alta y hay que seguir mejorando”.
La participación, la calidad de la hacienda y el buen clima entre cabañeros marcaron una edición que consolidó a Genética Rauchense como un evento clave para el sector ganadero local y regional.
“Llamaba la atención la fila completa de los toros y de las vaquillonas; la hacienda estaba muy pareja”, afirmó Zudaire, señalando que eso facilitó la elección para los compradores: “Había que mirar bien para decidir, eso ayuda a que los productores puedan elegir tranquilos”.
También destacó la buena relación entre las cabañas participantes: “Fue fabuloso trabajar con el resto de las cabañas, en un clima de alegría, toda gente con ganas de laburar. A todos nos fue bien porque te sentís cómodo trabajando así”.
Sobre la competencia, valoró la convivencia sana del sector: “es importante ver que todos producen para vender, pero sabiendo que si a uno le va bien, a todos les va bien. El mercado es libre y el clima en la ganadería en general es muy bueno, estés donde estés”.
El evento organizado por la Sociedad Rural de Rauch en conjunto con un destacado grupo de cabañeros locales fue un éxito a decir de los propios productores.
El remate, que incluyó toros y vientres de las cabañas “El Arroyito”, “El Casal”, “San Manuel”, “Don Manuel”, “Los Zorzales”, “San Román”, “La Z”, “El Retorno” y “San José”, logró precios que superaron las expectativas, especialmente en la venta de vientres, lo que refleja el interés y la confianza en la genética local.
Zudaire concluyó diciendo que esta edición fue una prueba superada y celebró que “todo salió fenómeno”.