La Fiebre Hemorrágica Argentina, conocida como el “mal de los rastrojos”, es una enfermedad causada por el virus Junín y afecta a una extensa región de nuestro país que abarca la provincia de Buenos Aires, sur de provincia de Santa Fe, Córdoba y La Pampa.
Rauch –según el mapa epidemiológico del Ministerio de Salud Bonaerense- se encuentra dentro de la denominada zona endémica, por tratarse de un distrito cuyo territorio es mayoritariamente rural.
Este virus lo contraen principalmente personas que trabajan, viven o visitan el campo o estuvieron en contacto con sitios invadidos por roedores del campo los cuales eliminan continuamente el virus a través de su saliva y orina, contaminando el medio ambiente en el que viven.

VACUNACIÓN
La vacunación es la principal forma de prevenir la Fiebre Hemorrágica Argentina, es altamente eficaz y se encuentra en el calendario oficial, y disponible en los efectores públicos del Ministerio de Salud de la Provincia.
Esta semana la referente en Rauch del Vacunatorio, Alejandra Patané, confirmó que la vacuna está disponible en Rauch y puede ser administrada a personas de entre 15 y 65 años. Sin embargo, es necesario que los interesados informen previamente su intención de recibir la vacuna llamando al teléfono del vacunatorio del hospital: 2494 56 6147. La vacuna se administra en una sola dosis y es por única vez, ofreciendo protección contra infecciones que pueden llegar a ser severas.
Deben vacunarse hombres y mujeres mayores de 15 años que no hayan sido vacunados anteriormente y que residan o desarrollen actividades en las zonas del área endémica. En el caso de las mujeres, no deben estar embarazadas o amamantando, ni presentar cuadros agudos o crónicos descompensados, estar recibiendo corticoides sistémicos o presentar cuadros de inmunosupresión congénitos o adquiridos y no deben haber recibido otras vacunas y/o gammaglobulinas, cualquiera sea, en el mes previo, ni recibirlas en el mes posterior a recibir la vacuna contra la Fiebre Hemorrágica Argentina.
SÍNTOMAS
Los síntomas que presenta la Fiebre Hemorrágica se inician con cuadro de fiebre, decaimiento y dolor de cabeza. Luego pueden presentarse dolores musculares, de articulaciones, detrás de los ojos, mareos, náuseas y vómitos.
Ante la aparición de cualquiera de estos síntomas es importante consultar al médico ya que existe un tratamiento que, si se administra a tiempo, aumenta las posibilidades de curar la enfermedad.