Luego de una negociación paritaria que se extendió más de lo esperado, el Gobierno Municipal y los gremios que representan a los trabajadores municipales arribaron esta semana a un acuerdo: 4% de aumento con los salarios de julio y la inflación más un por ciento con los salarios de agosto.
Desde la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) consideraron que el acuerdo fue positivo. Así lo definió el delegado local del gremio, Alberto Falabella.
“La primera oferta del Ejecutivo era insuficiente”, explicó Falabella en declaraciones a Radio Eich. “Habían tomado el 5% que nosotros pedíamos y lo dividieron en dos. Nos parecía demasiado bajo, más allá de que somos conscientes de que ni con el 4% solucionamos la vida de nadie”.
Falabella destacó que la intención del gremio era “evitar que el Ejecutivo impusiera unilateralmente un 2,5%”, por eso insistieron en seguir negociando. “Nos parecía fundamental poner aunque sea algo más en el bolsillo del trabajador y no seguir dilatando”.
Además, señaló que los municipios de toda la región están atravesando una situación financiera complicada: “Lo que están recibiendo es mucho menos de lo que deberían, y tienen que hacer malabares”. Por eso, aclaró que desde el gremio priorizan que los acuerdos sean sostenibles y se puedan pagar, aunque los porcentajes no sean los ideales.