Golpe a la educación: Las escuelas Técnico Profesional de Rauch pierden financiamiento nacional

Escribe Marcos Sayavedra, exdirector del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 70

La promulgación del Presupuesto Nacional para 2026 trae la novedad de la eliminación del Fondo Nacional para la Educación Técnico Profesional. Es que en su artículo 30 inc c. deroga el artículo 52 de la Ley Nº26058 denominada Ley de Educación Técnico Profesional (ETP), que creó en 2006 dicho Fondo que era “financiado con un monto anual que no podrá ser inferior al CERO COMA DOS POR CIENTO (0,2%) del total de los Ingresos Corrientes previstos en el Presupuesto Anual Consolidado para el Sector Público Nacional”.

Las instituciones de ETP de gestión estatal de Rauch, a saber, la Escuela de Educación Técnica Nº1, el Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº70, el Centro de Formación Laboral Nº401, el Centro Educativo para la Producción Total Nº5 de Miranda, han recibido partidas a través del Sistema de Transferencias de Recursos Educativos (SITRARED) dependiente del Ministerio de Educación de Nación (o como se denomine ahora), destinadas a financiar distintas líneas de acción, como por ejemplo, formación continua en campos de especialización, equipamiento de laboratorios, talleres y espacios productivos, adquisición de insumos, reparaciones menores, entre otros.

Así es que a partir 2016, el Instituto 70 desde que formó parte del Programa Nacional de Enfermería (PRONAFE), pudo, con dineros provenientes de este Fondo, equipar lo que hoy es su aula de prácticas formativas de enfermería, sus estudiantes recibieron la Mochila Técnica de Enfermería, con instrumentales de un enorme valor tanto económico como formativo para hacer sus prácticas, adquisición de bibliografía y de insumos propios de la carrera. También algunos profesores participaron en instancias de capacitación en Prácticas Profesionalizantes de esta carrera. Esto a modo de ejemplo en esta institución educativa que conozco y en una de sus tantas carreras técnicas.

Las demás escuelas de ETP de Rauch también pueden dar cuenta de todo lo que han podido lograr con esta clase de financiamiento.

Por poco que sean los montos que se hayan recibido, los directores han hecho las gestiones necesarias para que esos dineros se traduzcan en beneficios en la formación de sus estudiantes. No es lo mismo contar con un muñeco de simulación de enfermería que no, no es lo mismo contar un brazo para vías que no, no es lo mismo contar con una maquinaria de producción agrícola que no. Y así podemos seguir enumerando. Cada elemento que se haya podido adquirir a través de estas financiaciones ha tenido y sigue teniendo un gran impacto en la formación de nuestros estudiantes, garantizando cierta calidad en sus aprendizajes.

Gracias a estos fondos de Nación, nuestras escuelas de ETP tienen los equipamientos, insumos y demás que tienen hoy. Puede ser poco o mucho o nada, pero lo seguro es que pueden contar con ellos para que sus estudiantes tengan experiencias educativas diferentes a que si no las tuvieran.

Ahora bien, en plata, ¿a cuánto ascendería el Fondo en cuestión en 2026?

Según la Ley de Presupuesto Nacional aprobada, los ingresos corrientes de la Administración Central se proyectan que asciendan a un poco más de sesenta y cinco billones de pesos ($65.000.000.000.000). El 0,2% de esta suma representa unos ciento treinta mil millones de pesos ($130.000.000.000). Se prevé un superávit cercano a los dos billones setecientos mil millones de pesos ($2.700.000.000.000). ¡HAY PLATA! O sea que, desde mi punto de vista, puedo estar muy equivocado por supuesto, no representa ninguna amenaza al equilibrio fiscal pretendido. (Por favor, entendidos en el tema, revisen si lo que planteo es correcto o no). Y esto obviamente si es que se cumpliese con el piso que propone la Ley de ETP. Porque los datos que hay sobre el financiamiento en Educación por parte de Nación en estos dos últimos años son los menores desde la Ley de Financiamiento Educativo.

Evidentemente, la eliminación del Fondo Nacional ETP no responde a una cuestión financiera. Tiene que ver con una forma de entender a la Educación, a la participación del Estado en Educación, a la forma en que tiene que financiarse la Educación. Esto ya se vislumbra en el proyecto que circula de la nueva Ley de Educación que propondría el gobierno nacional denominado de “Libertad Educativa”.

Fondos que no llegan más a nuestras escuelas de ETP de Rauch, y de todo el país, son oportunidades perdidas de una mejora en la educación de nuestros estudiantes.